En nuestro primer día en el Delta del Ebro íbamos a visitar la Punta del Fangar. Hacía tiempo que queríamos acercarnos al Delta, así que aprovechamos unos días para hacer una escapada. No era la época más bonita porque los arrozales no estaban sembrados, pero nos serviría como una primera toma de contacto. El clima no nos acompañó durante nuestra visita a la zona, pero pudimos disfrutar de este gran paraje natural y de su gastronomía.

Como siempre nuestra lucha interna estaba servida, empezamos a hacer el equipaje y siempre salen mas mochilas de las que a mi (Quim) me gustaría y encima con Éric se suman más cosas, ropa, carro, juguetes y nuestra «pequeña» bolsa de las cámaras. Pero bueno, esto nos ocurre en todos los viajes y escapadas…

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Comer en Deltebre
Sin mucha prisa salimos de Barcelona, a través de la AP7 llegamos al Delta de Ebro. Entramos a la zona por L’Ampolla y nos acercamos hasta el pueblo de Deltebre. Era la hora de comer e iniciamos la búsqueda por Deltebre, la aplicación de Tripadvisor no nos ayudó mucho, las opciones que nos ofrecía eran un poco caras y Éric no estaba dispuesto a colaborar. Subido en su moto de juguete prefería ir en dirección contraria a la nuestra. Armados de paciencia descubrimos una reseña de un «bar de copas» según lo calificaban muy cerca, que se llama Tres Cantons. Un cartel anunciaba menú a 15€, así que sin más discusión entramos.

Disfrutando del arroz en el Delta del Ebro
De bar de copas no tenía mucho, pero de cocinar descubrimos que bastante idea si tenían, tenían tronas para los peques. Podíamos elegir entre bastantes primeros y segundos, nos decantamos por el arroz y la fideuá. Los platos eran generosos Éric comió de los nuestros y prefirió el arroz que estaba buenísimo. De segundo chuletas de cerdo y rabo de toro y de postre pedimos un pudding de chocolate que estaba increíble y helado, de momento era un buen comienzo antes de ir a la Punta del Fangar.

Con el estómago lleno nos acercamos al río Ebro a dar un paseo y hacer algunas fotos. Éric seguía con su amada moto pero al poco el que se empezó a quedar sin gasolina era él y se echó a dormir.

Como era temporada baja nos cruzamos con unos pocos lugareños. Fuimos a un embarcadero con un restaurante que estaba cerrado y daba un aspecto desolado, pero ya nos iba bien, estaba todo tranquilo. Volvimos al coche para acercarnos a la casa de nuestra anfitriona. Volvimos a elegir la opción de Airbnb. La casa estaba entre arrozales muy cerca de Deltebre, en una zona muy tranquila, Mireia fue muy agradable y en seguida nos mostró la casa que era muy acogedora. También tenía algunos juguetes que en cuanto Éric se despertó se puso a jugar con ellos.
Actualización Mayo 2022
Hemos quitado el enlace a la casa en la que nos alojamos en el Delta del Ebro porque ya no dan este servicio. Si quieres buscar alojamientos en esta preciosa zona te dejamos un enlace a Booking, aquí podrás encontrar muchos alojamientos por la zona.

Punta del Fangar
Nos acomodados en el que iba a ser nuestro nuevo hogar durante los próximos días. Con Éric despierto decidimos aproximarnos a la Punta del Fangar. Estaba muy cerca de la casa, en no más de 10 minutos llegamos hasta el parquing de los Vascos en donde había un restaurante cerrado. Mirando hacia el mar teníamos la playa de la Marquesa de 2,5 kms a la derecha y la playa del Fangar a la izquierda. Si no encuentras sitio para poner la toalla tienes un problema, estas playas cuando hace buen tiempo son tranquilas y de poca profundidad, ideales para ir con niños.

Mal tiempo en la Punta del Fangar
El tiempo no acompañaba, hacía mucho viento y frío, además estaba oscureciendo y nos dimos cuenta que no llegaríamos al faro del Fangar que es el atractivo de la punta. Nos dedicamos a hacer algunas fotos, jugar con Éric en la arena y buscar conchas. Llegamos casi a oscuras al coche para volver a la casa y retirarnos a descansar. Al día siguiente seguiríamos explorando el Delta del Ebro a pesar del mal tiempo que nos acompañaba.
Más lugares en el Delta del Ebro
Los siguientes días estuvimos en la Punta de la Banya y en los Ullas de Baltasar entre otros lugares. El Delta del Ebro es un lugar ideal para disfrutar de la naturaleza.
Al día siguiente íbamos a visitar Deltebre y las posibilidad de tener la lluvia como compañera eran muy altas.


